miércoles, 21 de noviembre de 2007

Hágalo Usted mismo!

Tambien podríamos haber titulado a esta entrada como "Aprendiendo un nuevo oficio", pero eso sería más bien personal y la verdad es que en esta aventura hemos participado directamente tres.

Quienes conocen la casa de Las Cruces, recordarán que las ventanas tienen unas tapas muy incómodas de abrir, lo cual hay que hacer para que entre algo de luz y el interior no tenga un aspecto parecido al castillo de Drácula o a catacumba romana.

Sin embargo, son necesarias para proteger las pocas pertenencias que nos hacen la vida más fácil por esos lados.

Aburridos de soltar y apretar tuercas cada vez que vamos, nació en nuestras mentes la idea de cambiar las tapas por rejas, lo cual nos impide salir, pero permite a la luz entrar a raudales.

Preguntamos cuánto nos costaría el trabajo y nos dijeron que $70.000.- por ventana.
Son ocho ventanas y eso nos dá más de medio millón de pesos... IMPOSIBLE!!

De modo que había que cortar por lo sano: hacerlas uno mismo.
Compramos una soldadora, fierros, soldadura, pintura y manos a la obra...
He aquí el resultado... ASOMBROSO! ¿Verdad?

Con el fondo del quincho para asados, producto de los primeros ensayos con la soldadora, vemos el trabajo de corte de fierros, que pudo terminar también en corte de mano, pero esa es una historia que por dignidad profesional prefiero no contar.

Independientemente de que se trata de un trabajo duro, como el fierro, hay que decir que es una de las cosas más entretenidas que hay, sumado al hecho de que el resultado es útil.


Labor de soldadura propiamente tal... el resplandor producido por este trabajo no se percibe aquí, pero sí se puede percibir que la primera reja va tomando forma.

Lo interesante es que no se trata de un trabajo al alcance de todo el mundo, pero con interés y porfía se puede lograr... lo que nadie pensaba era que iba a resultar tan bien... y sin entrenamiento de ninguna clase... sólo algunas preguntas precisas y luego el productivo ensayo y error...
Si creen que exagero o estoy alardeando, vean las fotos que siguen.

El trabajo de pintura es fundamental porque el aire marino tiene la particularidad de corroer rápidamente el fierro. Lo primero es aplicar un par de manos de antioxidante y luego un par de manos de pintura y eso es lo que está haciendo Alda en esta foto.


Luego el trabajo terminado e instalado recibe algunos retoques en la pintura en aquellos sectores donde el proceso de instalación produjo algunos daños.


Nótese el resultado profesional de todo el proceso con fondo musical deDiego (que puso su ayuda y no sólo la guitarra, poniendo en riesgo sus manos).






Y como corresponde, los buenos trabajos hay que inaugurarlos como Dios manda y para ello nada mejor que un buen pisco sour según la receta incomparable de Alda.

Salud!

















Nada más satisfactorio que un trabajo bien hecho por uno mismo, con la colaboración de Diego que puso la música y esfuerzo, pero que no apareció en las fotos porque fue él quien las tomó. Por último y, para ser justos, no podemos dejar de mencionar el inestimable apoyo y constante aliento que recibimos en todo momento por parte de Candela, quien siempre estuvo a nuestro lado.


Disculpen si esto salió más serio de lo que ustedes acostumbran a ver en este blog, pero es que nosotros SOMOS serios.


Hasta la próxima.